Igual que la
guitarra del Jimi o del Ata o del Eduardo o del Luis (nótese la marca generacional).
Siento por la poesía y sus hacedores una enorme gratitud. Si la poesía es una
forma de vida no veo criticable publicar, se da por añadidura, con naturalidad.
Claro que entendemos del enorme valor del lenguaje. De la importancia del
trabajo. Del oficio. Pero disculpen si lo que llamamos poema es apenas un
estado primitivo de lo humano en la palabra. Sería deshonesto si dijera que no
quiero alguno de mis primeros textos. No sé si son poemas. Nacieron a la sombra
de tanta lectura y de tanta música.
Hay que permanecer en el asombro para leer
poesía.
Si la palabra es para saborear como dijera alguien por allí, el poema es como el vino: usted lo prueba y aunque no sea un catador sabe si volverá a cargar la copa o la dejará intacta.
A mí me sale de
decir gracias por la poesía. Son muchos los autores que admiro y respeto. Sería
muy extensa la lista e incluyo en ella a copoblanos míos, poetas del interior
que laburan en digno silencio.
2 comentarios:
Si hay algo que al Argentino no le falta , es quizás la letra para describir la vida en poesía. Hermoso tu trabajo Hugo.
muchas gracias Fred... gracias por tu lectura... y disculpa mi demora pero entro poco... saludos y buen año 18
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