Los días cantan
mañanas / los días no tienen miedo – F. Páez
Mira el sol, me decía el ciego
Que llevo adentro
Íbamos a la velocidad de la luz
Esquivando los cuellos de los avestruces
Encendidos
Y las lentas vacas de nuestra imaginación
Una tarde estupenda para clavarse un espinillo
En el alma
Los ceibos todos florecidos en el pelo de las chinas
Más bellas
Los arroyitos amplificados a mares
Aturdiendo la vastedad de la gramilla revuelta
De los campos recién arados
Abiertos al día de la semilla
Mira ese bosque de llamas
Mira los caracoles púrpuras
Mira los remolinos que te expulsan hacia otra profundidad
Mira la congelada cobardía en la punta de las estrellas
que nos traicionaron
Mira los ojos de la felina madrugada
Íbamos con la lanza rota pero la punta intacta
2 comentarios:
Qué bellezón!
Cariños a paladas,
Nená
jajaja... gracias querida amiga!!
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